Revolución económica, cero emisiones netas de CO2

El objetivo de la economía global es llegar a cero emisiones netas de CO2 hacia el 2050. Esto implica una profunda transformación en las estructuras y procesos de producción y consumo. Como sabemos, el CO2 se emite principalmente por medio de la combustión de combustibles fósiles en la generación de electricidad y en el transporte, así como en procesos industriales como la producción de acero, cemento, fertilizantes, y petroquímica, y a través de la deforestación provocada por la agricultura y la ganadería.

Minería, conflicto constitucional

La minería en México está envuelta en una controversia existencial. Es sin duda un sector estratégico para nuestra economía, pero también significa severos conflictos con los propietarios de la tierra (ejidos, comunidades, personas físicas), además, claro, de plantear riesgos ambientales muy relevantes. La minería genera el 8.3% del PIB industrial, y el 2.3% del PIB nacional. Es un potente motor de exportación, con más de 18 mil millones de dólares anuales.

Sector Eléctrico Bajo Control del Estado

Una de las mentiras más frecuentes de los personeros del régimen, socorridas ad nauseam en el Parlamento Abierto, sobre la propuesta de contrarreforma eléctrica del presidente López, es que el Estado perdió el control del sector con las reformas de 2013. Esto es totalmente falso. La verdad es que el Estado nunca ha perdido el control, y esto tiene un obvio sentido teórico y práctico. El sector eléctrico incluye componentes que son monopolios naturales (como las redes de transmisión y distribución) y tiene importantes externalidades asociadas a contaminación atmosférica, emisiones de gases de efecto invernadero, y también al bienestar de la población y al desarrollo general del país. Es un servicio público fundamental. Por ello es indispensable el control y regulación del Estado.